Seguramente te ha pasado: estás fuera de casa, de viaje o en casa de una amiga preparándote para salir, y al momento de ponerte las pestañas postizas… ¡te das cuenta de que olvidaste las pinzas! No entres en pánico. Aunque las pinzas facilitan el proceso, no son imprescindibles. Tus dedos, si los usas con cuidado, pueden hacer el trabajo igual de bien. En este blog te enseñamos cómo aplicar tus pestañas sin pinzas, usando solo tus manos y lo que tengas a la mano.
Primero, asegúrate de tener lo básico: tus pestañas postizas favoritas, pegamento para pestañas (ya sea transparente o negro), un espejo, y tus manos bien limpias. Si cuentas con un hisopo o una brocha delgada, pueden servirte de apoyo, pero no son obligatorios. Esta guía te ayudará cuando estés fuera de casa, para que puedas usar pestañas postizas incluso sin pinzas.
Paso a paso: aplica tus pestañas sin pinzas
Lo más importante al usar los dedos en lugar de pinzas es la paciencia. Aquí va el paso a paso:
1. Lava bien tus manos.
Este paso es básico. Recuerda que vas a estar muy cerca de tus ojos, así que necesitas las manos completamente limpias para evitar irritaciones o infecciones.
2. Retira las pestañas del empaque con cuidado.
Tómalas por los extremos, no por el centro, para evitar que se deformen. Si sientes que están muy pegadas, presiona suavemente hacia abajo con la yema del dedo para soltarlas.
3. Mide la pestaña en tu ojo.
Antes de aplicar el pegamento, colócala sobre tu párpado para ver si necesitas recortarla. Si es más larga que tu línea de pestañas, córtala un poco desde el extremo externo.
4. Aplica el pegamento.
Toma uno de los pequeños grupos de pestañas y aplica una gota de pegamento en la base. Puedes colocar un poco de pegamento en el dorso de tu mano o en una superficie limpia, y pasar por ahí la base del grupito. Espera unos 20 a 30 segundos hasta que el pegamento se sienta más pegajoso, así se adhiere mejor al aplicarlo.
5. Coloca las pestañas por secciones usando tus dedos.
Sujeta el grupo de pestañas con los dedos pulgar e índice, como si fueran pinzas. Colócalo justo debajo de tus pestañas naturales, lo más cerca posible de la raíz, pero sin tocar la piel del ojo. Empieza desde el centro del ojo y ve aplicando más grupos hacia los lados. Si necesitas más precisión, puedes ayudarte con la parte de atrás de una brocha delgada o un hisopo para empujarlas suavemente y fijarlas bien.
6. Ajusta y presiona.
Una vez que la pestaña está en su lugar, usa la yema del dedo para presionar suavemente la banda contra tu párpado, desde el inicio hasta el final. Asegúrate de que esté bien pegada, especialmente en las esquinas.
¿Y si no tienes espejo?
No es lo ideal, pero puedes usar la cámara frontal de tu celular en modo selfie. Apóyalo sobre una superficie firme, activa el modo con buena luz y acércate lentamente. Requiere un poco de pulso, pero es una buena solución cuando estás fuera de casa.
Y si te pones nerviosa, recuerda que nadie nació sabiendo. Cuanto más practiques, más fácil será. Después de unas cuantas veces, ya ni vas a extrañar las pinzas.
¿Y si quieres algo aún más fácil?
Si después de todo esto sientes que aplicar grupos de pestañas con pegamento aún se te complica, te tenemos una solución perfecta: las pestañas autoadhesivas. No necesitas pegamento, ni pinzas, ni experiencia. Solo las sacas del empaque, las colocas con los dedos y ¡listo! Son ideales para llevar en la bolsa, para viajes o para esos días en los que no tienes tiempo pero igual quieres verte arreglada.
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